Comienzo este pequeño rincón para compartir mi experiencia como cooperante voluntaria en Mali, dejando también un espacio abierto para tí y lo que se nos vaya ocurriendo entre las personas que por aquí pasemos.

martes, 27 de noviembre de 2012

With my own two hands

Martes lagunero húmedo. Con esta por lo menos son dos las semanas en las que no ha parado de llover, así que la vista que tengo de mí pequeño patio-jardín  desde la renovada cocina me lleva a acordarme de esa lluvia tropical que nos cayó en el Barrio de los Rusos en La Habana mientras comíamos los chicharritos que Niurca había frito. Vale que es un estorbo salir y notar un ligero descenso de la temperatura, puede que resulte incómodo caminar entre la ropa tendida que parece no secarse nunca pero el verde que tienen las plantas y el tamaño que están alcanzando las tomateras y la rúcula me dan una satisfacción que hacen que se me olvide la lluvia, el posible catarro y la letanía de tener que ponerme un chubasquero.
Vuelvo al ordenador, de donde sale la voz de Ben Harper que dice que puede cambiar el mundo con sus dos manos, hacer de él un lugar mejor y más amable. Si todos creyésemos algo parecido en vez de tener miedo a que nos puedan echar del trabajo, o miedo a parecer de repente mayor, o lo que es peor, ser mayor y darse cuenta que hemos gastado parte de nuestros días con miedo a que ese momento llegara y nos sintiéramos vacíos al mirar al pasado. Pero eso, más que menos, es irremediable y anclarnos en lo que pudo haber sido y no fue es el clavo ardiente que nos impide avanzar.

Pero muchas personas, como las Mediasmujeres Marisol y Sonsoles, personajes del fabuloso libro que me ha dejado mi hermana "El lector de Julio Verne"; emprenden constantemente empeños que nuncan llegan a culminar, siempre , en su opinión, por culpa del provinciano erial donde les ha tocado vivir. Esto era así en un pueblo de Graná en ls años 50 y sigue siendo así en cualquier gran ciudad. ¿No será que tenemos que buscar en nosotros la motivación y asumir la responsabilidad de nuestras elecciones acertadas y fallidas?

 Esta tarde, mientras hacía la digestión de un arroz negro increíble compartía con mi pareja una lectura de un compi de facultad (qué alegría Alfonso!) que me hizo pensar en todas esas cosas que yo quiero ser y quiero hacer y a veces no hago. Ahora sé que la pista está en empezar por hacer sábado . enlazo el artículo proque me parece revelador, muy acertado y además de una exquisitez literaria por su sencillez (las cosas claras y el chocolate espeso). http://www.universomotivia.com/blog/por-donde-empezamos/

Me sirvo un café más que por el aliciente de tener algo calentito entre las manos por mojar galletas que se deshacen en la boca. Placeres que saben mejor con la lluvia de fondo.

Sigo leyendo, y me entran ganas de querer compartirlo todo. Ahora se trata de un artículo muy bueno sobre la violencia machista (gracias Diana por afinarme el término) que también enlazo http://www.eldiario.es/Kafka/cono-huele_0_72093155.html

Yo sigo haciendo lo que puedo , a veces con mis manos, a veces con mis pensamientos para que Alma o Noha, recién llegados al planeta se encuentren un mundo menos inhóspito y más tolerante.